Desde hace varios años, los expertos han advertido que los ordenadores cuánticos podrían acabar con la criptografía clásica. En mayo de 2024, un equipo chino vulneró exitosamente el cifrado SPN utilizando un ordenador cuántico D-Wave. Este avance pone en riesgo el estándar AES, ampliamente utilizado.

Los investigadores de la Universidad de Shanghái, liderados por el profesor Wang Chao, publicaron un estudio que detalla cómo lograron vulnerar el cifrado.

Usaron un enfoque doble: combinando problemas de optimización con búsquedas, y utilizando el algoritmo de Schnorr junto con otros métodos cuánticos. Esto representa una amenaza real para algoritmos de cifrado de grado militar como el AES-256.

El impacto en las criptomonedas

Juan José García Ripoll del CSIC ya había anticipado este riesgo. Afirmó que los ordenadores cuánticos podrían hacer vulnerables los algoritmos actuales. Existe una investigación creciente en criptografía resistente a máquinas cuánticas como respuesta a esta amenaza.

Recientemente, investigadores de Google publicaron que un entero RSA de 2048 bits podría ser vulnerado en menos de una semana por un ordenador cuántico.

Aunque no contamos con máquinas tan potentes aún, se espera que en pocos años puedan desarrollarse. IBM, por ejemplo, planea lanzar su primer hardware cuántico avanzado en 2029.

Las criptomonedas no son inmunes a esta amenaza. Aunque utilizan una criptografía basada en curvas elípticas, que es más robusta que el RSA, comparten fundamentos matemáticos que podrían ser vulnerados igualmente.

Un equipo de la Universidad de Kent sugiere que Bitcoin podría actualizar su cifrado en diez meses sin detener su red, lo que muestra la urgencia de prepararse ante esta nueva era cuántica.

Preparación para la era cuántica

La rapidez con que la tecnología cuántica avanza ha generado preocupación entre expertos en seguridad informática. Por esta razón, la comunidad tecnológica está enfocándose en desarrollar criptografía cuántica-resiliente que pueda soportar las capacidades de estas futuras máquinas.

Las implicaciones de estos desarrollos son profundas. No solo afecta a entidades financieras y criptomonedas, sino también a cualquier sector que dependa de la seguridad de los datos.

En definitiva, mientras la tecnología cuántica sigue su ascenso, la comunidad debe estar preparada para adaptar y robustecer sus métodos de cifrado.